Abdayán Guzmán Cruz, hijo de José de Jesús Guzmán Jiménez, y hermano de Amafer, Armando, Solón y Venustiano Guzmán Cruz, solicitó a las autoridades que se esclarezca la desaparición de sus familiares, quienes cumplieron 47 años, las cuales se dieron entre 1974 y 1976, en la comunidad de Tarejero, municipio de Zacapu, hechos que no “no pueden quedar impunes”
Morelia, Michoacán. (OEM- Infomex). Con una cifra que podría rebasar las 900 personas desaparecidas en Michoacán, en un periodo del 2006 al 2013, sus familiares, a través de diferentes Organizaciones como P’urhépecha y el Comité de Familiares Detenidas Desaparecidas, continúan en su lucha en contra del olvido, la simulación, el engaño y la impunidad, por lo que exigieron justicia a las autoridades del estado y federación.
En rueda de prensa la vocera Comité de Comité de Familiares de Personas Detenidas Desaparecidas en México “Alzando Voces”, Dora Jaimes, calificó a los gobiernos como omisos ante la problemática que millas de familias han vivido por más de cinco décadas.
La activista, quién busca a su hermano desparecido desde el 2013, exigió desde la plaza Melchor Ocampo de Morelia, verdad y justicia para que el estado haga su trabajo y aclare las desapariciones que se reportan en Michoacán y el país.
“Exigimos justicia, exigimos verdad, como también lo hacemos desde 11 años en Morelia acompañando casos de desaparición. También seguimos pugnando para que el estado haga su chamba, su trabajo. Seguimos luchando para que los ciudadanos no se queden indiferentes ante estos actos que se siguen perpetrando ”.
Refirió que actualmente las desapariciones forzadas no son tan frecuentes, ya que se ha cambiado la forma de operar y ahora se realizan ejecuciones extrajudiciales.
Rueda de prensa de los familiares / Foto: Iván Villanueva | El Sol de Morelia
Abdayán Guzmán Cruz, hijo de José de Jesús Guzmán Jiménez, y hermano de Amafer, Armando, Solón y Venustiano Guzmán Cruz, solicitó a las autoridades que se esclarezca la desaparición de sus familiares, quienes cumplieron 47 años, las cuales se dieron entre 1974 y 1976, en la comunidad de Tarejero, municipio de Zacapu, hechos que no “no pueden quedar impunes”
Ante ello, pidió que el gobierno federal instale una comisión de la verdad para aclarar los casos, en donde estén representantes de las familias afectadas, quienes son los primeros que deben saber la verdad sobre lo que les sucedió a sus familiares, a casi medio siglo de su desaparición